Colágeno, la proteína que se encuentra cada vez más presente en el mundo de los suplementos y la dermo cosmética.
Desde beneficios estéticos (salud de piel, cabello y uñas), hasta un sistema óseo fuerte y saludable, el colágeno se ha convertido en una de las proteínas más utilizadas a nivel mundial.
Sin embargo, muchas personas presentan dudas sobre si es necesario consumir esta proteína o no… ¿su consumo realmente puede generar una diferencia en nuestra salud?
A continuación, nos enfocamos en 4 grupos de personas, las cuales podrían beneficiarse del consumo adicional de colágeno.
Personas que necesitan apoyo en la salud de los músculos, huesos y articulaciones
El colágeno, la proteína más abundante en el cuerpo humano, juega un rol fundamental en la salud de los músculos, huesos y articulaciones. Esto se explica debido a que el colágeno es el principal componente de los tejidos cognitivos que conforman varias partes del cuerpo, incluyendo los tendones, los ligamentos y los músculos.
A medida que envejecemos (o exigimos mucho a nuestros huesos desde jóvenes), la masa ósea se ve afectada. Esto puede conducir a desarrollar patologías como la artrosis, artritis y osteoporosis, entre otras.
La baja densidad y debilidad ósea, causada por la falta de colágeno, incrementa la probabilidad de sufrir fracturas óseas. Por lo tanto, el consumo de colágeno ayuda a mantener la integridad de los tejidos y a regenerar el desgaste y envejecimiento de los mismos.
Personas con problemas intestinales
Agregar colágeno en la dieta de aquellas personas que sufren problemas de salud intestinal, como la hinchazón y la indigestión, podría cambiar las reglas del juego.
El colágeno previene el síndrome del intestino permeable, por lo que, a través de su consumo, se logra absorber todos los nutrientes y evitar las carencias metabólicas. Adicionalmente, también se mejora el tránsito intestinal gracias a que la pared intestinal se vuelve más elástica y flexible.
Otro de los aminoácidos que contiene el colágeno es la glicina. Una de sus principales características es el efecto antiinflamatorio.
Personas mayores a 40 años (especialmente mujeres)
A partir de los 25 años nuestra producción de colágeno comienza a disminuir. Alrededor de los 40 años, su disminución en la producción se ve incrementada drásticamente, especialmente en mujeres que cursan la menopausia. En esta etapa, las variaciones en la producción de hormonas incentivan la pérdida de colágeno en el cuerpo, efecto que repercute en otros aspectos físicos.
Al ser el principal componente de la piel, huesos, tendones, ligamentos, cartílagos, articulaciones, pelo y uñas, el deterioro de su producción puede llevar a diversos problemas, empezando por la piel (la misma se vuelve más fina, generando arrugas y flacidez). Con respecto al cabello, el mismo se vuelve débil y menos fuerte, lo que fomenta su caída. Por último, las uñas también pierden fuerza y son más propensas a partirse.
Deportistas
Tal como se mencionó anteriormente, el colágeno aporta flexibilidad y fuerza a nuestros músculos, huesos y articulaciones, condiciones necesarias con las que debe contar un deportista para cuidar de su salud. Adicionalmente, ayuda a disminuir el dolor y la inflamación articular, reduce el riesgo de rotura de los huesos, dota firmeza y consistencia al cuerpo (masa muscular) y es determinante a la hora de transmitir fuerza a nuestros músculos.
Por supuesto, cuando se trata de deportistas o personas que realizan actividad física, se debe tener presente que el colágeno es un complemento, y para que todo resulte, el mismo se debe acompañar de una dieta equilibrada y hábitos saludables.
Entonces… ¿debo o no debo incorporar más colágeno a mi dieta?
Si perteneces a alguna de las categorías anteriores, complementar tu alimentación con una mayor cantidad de colágeno probablemente suene bastante bien. Sin embargo, según varios estudios, no se sugiere consumir más de 10 gramos de proteína al día, ya que, de hacerlo, estaríamos incurriendo en una dieta hiperproteica y podríamos generar consecuencias negativas en nuestro organismo.
Sigue leyendo para descubrir las diferentes opciones de incluir colágeno a tu dieta y así mantener el cuidado de tu salud.
4 formas de incrementar los niveles de colágeno en tu cuerpo
1. Suplementos nutricionales ricos en colágeno
El colágeno se encuentra compuesto por aminoácidos enlazados, incluidas altas cantidades de los aminoácidos arginina, glicina, glutamina y prolina. Curiosamente, estos aminoácidos no se encuentran disponibles en grandes cantidades en la mayoría de los alimentos proteicos. Este contenido específico de aminoácidos es una de las razones por la que los suplementos toman un gran peso en el consumo de esta proteína.
Los suplementos también son una buena opción para aquellas personas que carecen de tiempo en la cocina, lo que les impide armar platos completos (ricos en proteína, verduras y carbohidratos).
Este tipo de productos, generalmente, no contienen más de 5 gramos de colágeno por dosis diaria. Por lo tanto, combinando suplementos ricos en colágeno junto a una alimentación balanceada, estaríamos logrando un nivel óptimo diario de esta proteína.
2. Consumir suficiente proteína en la alimentación
La ingesta alta de proteínas en la alimentación es especialmente importante durante la mediana edad y la vejez. Es fundamental consumir proteína (al menos una) en las principales comidas.
La proteína colágeno la podemos encontrar en la carne, el pescado, los huevos, los productos lácteos y las legumbres.
3. Incrementar el consumo de Vitamina C y Zinc
La vitamina C es esencial para la síntesis de colágeno. Por lo tanto, incorporar alimentos ricos en vitamina C es una pieza importante para promover los niveles de proteína en el cuerpo.
El mineral zinc es otro nutriente que utiliza nuestro cuerpo para producir colágeno, por lo que también es importante incluirlo en la alimentación.
*Para promover la producción de colágeno en dietas vegetarianas/veganas, consumir alimentos ricos en vitamina C y Zinc pueden ser una buena opción.
4. Evite malos hábitos
Ciertos hábitos no tan saludables pueden hacer que su cuerpo pierda colágeno a un ritmo mayor, ya que contribuyen al daño de los radicales libres y al estrés oxidativo, generando asi el conocido “envejecimiento prematuro”.
Alguno de los hábitos que se debe evitar: el tabaco, el alcohol, exposición al sol (en exceso), estrés crónico y falta de sueño, dieta alta en comida procesada, sedentarismo, déficit de vitaminas y minerales.
En resumen
El colágeno es crucial para la salud y el bienestar por varias razones, y tomar medidas diarias para ayudar a aumentar la producción de colágeno puede ser de gran ayuda.